Después de la salida del último jugador español del equipo canino, el MVP y máximo anotador de la temporada regular, Notorious Alien, se vio obligado a anunciar la retirada de su equipo de los play-offs, dando a los Gepetto un pasillo a la final sin sudar la camiseta. Anterior a Konan, el Jordan onubense DAG y God Noxus ya habían dejado sus cartas de dimisión, descontentos de como Notorious llevaba las riendas del equipo. Desde una perspectiva superficial, se podría tomar la decisión de los jugadores nacionales como producto de la impulsividad, inmadurez o egoísmo. Incluso en los ultimos dias se han divulgado comentarios de la carencia de grosor en cuanto la piel de los ex-jugadores autóctonos de los Underdogs. Al fin y al cabo, los resultados en el campo hablan por sí solos; el equipo casi se lleva el título de la temporada regular y ha producido al MVP de la misma. La verdad es que poco más se le puede pedir a Notorious y de los Underdogs.
Pero tras escuchar las declaraciones de uno de los comunitarios, se pudo dilucidar que en los Underdogs había un problema interno muy grave tal malas hierbas arraigadas en las grietas de una calzada. Y el problema del cual se habla fue la falta de compatibilidad fuera del campo entre jugadores españoles y extranjeros. Quejas como faltas de respeto, o incluso secuelas de favoritismo salieron como algunas de las causas. Al parecer, como el famoso pasaje de San Mateo indica, el hombre no puede vivir solamente del pan, en la misma medida que un equipo no puede mantenerse juntos con meras victorias en el caso de los Underdogs. En cuanto mi opinión personal, creo que se echaba en falta una mano firme por parte de Notorious a la hora de mediar y equilibrar las pasiones de los jugadores cánidos. No hay nada más ignominioso que tirar por la borda la clasificación a las semifinales por una posible carencia de carácter y liderazgo. O peor, que muchos errando piensen que todo se fue al carajo por un falso caso de “lameculismus ad peregrinum” producto de la pasividad ante los conflictos internos.