Cuando se menciona a los Mambas o los Manolos, lo primero que viene a la cabeza es la palabra “campeón”. En efecto, los dos no tienen nada más que probar en cuanto capacidad de ganar un título; los primeros mencionados ya saben lo que es ganar un anillo y el segundo ha demostrado más que de sobra desde el año pasado que no están solamente para llenar un hueco. Sin embargo, en los partidos disputados ayer esta teoría quedó en un segundo plano, y en vez de ver una serie igualada y reñida, los Manolos arrasan la serie en dos partidos de manera dominante.  

El primer partido en un principio prometía lo que todos habíamos esperado de un enfrentamiento de tal magnitud. La primera mitad fue férreamente disputada, de la cual era muy difícil predecir al ganador. Los Manolos, liderados en los dos primeros cuartos por el portentoso Búlgaro (el líder defensivo de la temporada regular) y la maravilla malagueña Zyr, anotaban fácilmente en la pintura y la media distancia, mientras que los Mambas respondían por igual con la genialidad del vigente MVP de las finales Fresh Cash (apoyado por la tenacidad de Asterazo, y el acierto en las esquinas de Iker Buckets y Don Pelayo). Sin embargo, a partir del tercer cuarto, como predijo el comentarista temporal y becario Torry, la discrepancia en cuanto recursos ofensivos fue evidente. Y en efecto, la ofensa de los Mambas dependía mayormente de un triple ausente de Jefe y del talento de Fresh. Los Manolos en cambio poseían un repertorio tan amplio digno de un equipo de categoría; mientras Jefe buscaba el triple con la misma dificultad que uno sufre cuando busca a Wally, Pablo encontró los espacios para acribillar a las serpientes en el perímetro. 

Bulgaro matando a la serpiente sin piedad.

Del segundo partido no hay mucho que añadir en cuanto la narrativa del mismo. Los Mambas, en contra de la naturaleza del nombre del equipo, seguían igual de inflexibles tal cuero viejo, mientras que los Manolos, esta vez liderado por Zyr (la estrella más grande que produjo Málaga antes que un tal Antonio Banderas), avasallaron sin piedad a la defensa de los ofidios. El resultado final reflejó todo lo mencionado; los Manolos ganaron el segundo partido sin muchas complicaciones. La incapacidad de los Mambas de salirse de los apuros se debe mayormente a la falta de calentamiento de los dos jugadores clave del equipo (Asterazo y Jefe). NBA 2K tiene una memoria muy corta, y para mantener un alto nivel de juego es imprescindible echarle horas. Ahora solo les queda (a los Manolos) un peldaño más por escalar, uno muy resbaladizo en forma de los Geppetto Brothers con un Fardo que parece haber encontrado su magia. 

En la foto sale la segunda estrella que salió de Malaga. El primero es Zyr.